Hay algunos estudios que señalan a que el consumo de vino es menos perjudicial que el de cerveza si se mezcla con antiinflamatorios, pero la prueba no es aún suficiente para aseverarlo con rotundidad. Lo que sí es es cierto que, a mayor graduación alcohólica, mayor toxicidad se muestra en menos tiempo. Los antiinflamantorios no esteroidales, como el ibuprofeno,tienen la posibilidad de produir como efecto secundario una lesión sobre la mucosa gàstrica. La ingesta simultània de alcohol aumenta este riesgo puesto que impulsa la secreción ácida en el estómago y se puede produir espigastrágia (dolor en el estómago), pirosis y en situacions más extremes, úlceres y hemorràgies digestibles.
Se recomienda tomarlo con las comidas, especialmente si se tienen molestias digestibles. Por otro lado, en caso de olvidar una toma, la Aemps detalla que no hay que tomar una dosis doble para compensar la dosis olvidada. \’\’Si olvida tomar su dosis correspondiente, tómela tan pronto como se acuerde.
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Se puede destacar que en casos muy puntuales en los que se ha ingerido un único ibuprofeno, la ingesta moderada de bebidas alcohólicas no va a tener secuelas graves para el organismo. Aun de este modo, la combinación de alcohol e ibuprofeno no debe transformarse en algo frecuente. El ibuprofeno es analgésico y antipirético , y, a diferencia del paracetamol, también es antiinflamatorio .
“El consumo agudo de alcohol reduce la actividad de las enzimas del hígado que intervienen en el metabolismo de ciertos medicamentos como este”, explica Aliaga. El enlentecimiento del metabolismo aumenta la concentración de este medicamento en los órganos receptores y, con esto, asimismo su actividad y efectos adversos. “El alcohol es tóxico para el hígado, así que ingerido al lado del paracetamol se capacidad su toxicidad y el daño hepático”, insiste la médica. “El alcohol, exactamente la misma el ibuprofeno, aumenta el peligro de lesión a nivel de la mucosa digestible. Conque si se toman juntos, este efecto secundario asimismo se potencia”, explica Aliaga.
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Así como asegura la médica, lo que sí influye es el volumen de alcohol que tiene la cerveza, el vino o la ginebra. “La gradación es la proporción de etanol que tiene la bebida. A mayor gradación, mayor cantidad de alcohol y mayor posibilidad de interacción y daño hepático”, resalta Aliaga. En la situacion del ibuprofeno, su consumo mezclado con bebidas alcohólicas puede generar afecciones gástricas debido a que aumentan las pequeñas lesiones que los antiinflamatorios causan en la mucosa gástrica. Al metabolizar de manera más rápida, el efecto de los medicamentos se desvanece antes y puede ser necesario aumentar las dosis o repetir las tomas con mucho más asiduidad, lo que tampoco es conveniente. En primer lugar, el consumo de alcohol habitual hace más rápido el metabolismo de manera general y esto influye en el comportamiento de los medicamentos, no solo el ibuprofeno. Beber bastante alcohol de manera puntual, por ejemplo, en una noche de celebración, y tomar ibuprofeno provocará que el fármaco se metabolice de forma mucho más lenta y, por tanto, hay que espaciar las tomas de ibuprofeno en el caso de necesitar mucho más dosis.
Por tanto, lo mejor, en caso de tener que decantarse por algo, sería el ibuprofeno, que actuará como antiinflamatorio para nuestro organismo; y analgésico para el dolor y el malestar. No obstante, en este caso también hay que tomar precauciones, en tanto que el consumo elevado de ibuprofeno podría provocar un desequilibrio y también irritación en nuestro sistema digestivo. El ibuprofeno no está correcto para personas con problemas de hígado, de estómago, que hayan tenido alguna úlcera o hemorragia y está completamente prohibido durante el embarazo, a salvedad del intérvalo de tiempo de lactancia, donde sí estaría tolerado al igual que el paracetamol. Es importante ingerirlo siempre y en todo momento tras las comidas y nunca hay que superar la dosis sugerida diaria, ni alterar la duración del tratamiento. Un consumo elevado de alcohol tiene efectos tóxicos en el organismo, pero, unido a un fármaco, es mucho más peligroso. Lo idóneo es no combinar ibuprofeno y alcohol y generalmente, no mezclar ningún medicamento con bebidas alcohólicas.
Primeramente, es importante resaltar que los fármacos y el alcohol no son buenos amigos, ya que el consumo de los dos al unísono puede tener secuelas graves para la salud humana. Y es que el alcohol interactúa con una cantidad esencial de fármacos y puede provocar resultados perjudiciales. Tienes una comida o una celebración donde seguro beberás algo de alcohol, pero antes te dolía algo y te has tomado una pastilla, es entonces en el momento en que te preguntas “¿qué ocurre si me tomo un ibuprofeno y bebo alcohol?”. Por lo general, no tienen que mezclarse fármacos y bebidas alcohólicas, en tanto que el resultado podría producir consecuencias negativas. Para solucionar tu duda en este caso concreto, en unComo queremos explicarte qué sucede si tomas un ibuprofeno y bebes alcohol.
¿Por Qué No Debes Combinar Ibuprofeno Y Alcohol?
El ibuprofeno es un medicamento enmarcado en los antiinflamatorios no esteroideos . Cuenta con características antipiréticas, es decir, baja la fiebre, analgésicas, para calmar el mal y antiinflamatorias. Este producto es únicamente informativo, en unCOMO no tenemos facultad para recetar ningún tratamiento médico ni realizar ningún tipo de diagnóstico. Te recomendamos acudir a un médico en la situacion de enseñar cualquier género de condición o malestar. Por ejemplo recomendaciones, los expertos asimismo apuestan por sustancias como el jengibre, bien añadido a nuestros platos o lo mejor para estas situaciones, como infusión, ya que mejora las náuseas y contribuye a terminar con esa sensación de mareo.
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Ariane Soria García es dietista-nutricionista y creadora del centro de nutrición \’Alimentando Paso a Paso\’, en Bilbao. Todos y cada uno de los contenidos publicados en Doctoralia, en especial preguntas y respuestas, son de carácter informativo y en ningún caso tienen que considerarse un sustituto de un consejos médico. Por motivos legales necesitamos tu permiso para lograr mandar tu consulta de salud a un experto.
En cuanto a la toma de alcohol, se desaconseja su consumo mientras que se esté en tratamiento con ibuprofeno, puesto que podrían acrecentar los efectos adversos a nivel gastrointestinal. Y a veces hacemos un uso abusivo del mismo, menospreciando por completo sus efectos adversos. Muchas personas lo adquieren en farmacias sin prescripción médica y sin conocer los inconvenientes de tomarlo de manera inapropiada. Ciñéndonos a su pregunta, el alcohol etílico (el alcohol que se encuentra en las bebidas alcohólicas) capacidad la toxicidad del paracetamol, con lo que podría generarse un daño hepático. De esta forma, a pesar de los mitos y la desinformación, lo mucho más prudente es proseguir la lógica que nos dice que no conviene tomar ni una gota de alcohol mientras que estamos en tratamiento. “En ningún caso se aconseja la utilización de estos fármacos con el alcohol puesto que es realmente difícil conocer todos y cada uno de los causantes que en un momento dado pueden llevarnos a la aparición de un contraefecto fatal”, concluye.